Confieso que no quiero decir adiós. Llevo ya mucho tiempo en esta escuela y me duele tener que dejarla. Quizá suene mejor un “hasta luego” o mejor aún, un “hasta pronto”, aunque sé que ya nunca será lo mismo. Y es que los cambios nunca son sencillos, y menos cuando se debe cambiar de algo muy querido a algo completamente desconocido
adios escuela
siempre recordare todo lo que hize ahi